Discreta, cobijada por los imponentes edificios que se alzan en la plaza Vázquez de Molina, descubrimos una pequeña joya.
Justo en el epicentro de la plaza, rodeada por unos jardines, se ubica esta hermosa fuente de estilo renacentista.
Consta de un sólo caño vertical que derrama agua a una pileta decorada a base de relieves de ranas, lagartos y serpientes de agua. Esta pileta vierte a su vez a un pilar octogonal, que cuenta con un relieve labrado en cada una de sus ocho caras. Originariamente esta fuente no se encontraba aquí, sino que decoraba el patio del Palacio de Don Francisco de los Cobos y Molina. El que fuera la mano derecha del Rey Carlos V recibió esta fuente como regalo por parte del Embajador de Roma, Micer Mai, lo que explica su armonioso estilo itálico tan admirado por los renacentistas españoles de la época.
LENGUA DE SIGNOS
Lenguaje Sencillo
LENGUAJE SENCILLO Entre los jardines centrales de la Plaza Vázquez de Molina |
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