La posición estratégica de Úbeda la ha convertido, históricamente, en una ciudad muy codiciada. En el siglo X, cuando la ciudad se encontraba bajo dominación musulmana, Úbeda se amuralló.

Durante la Reconquista se convirtió en uno de los recintos amurallados más importantes de la región, debido a su posición fronteriza.

Hay testimonios escritos del siglo XVI que se refieren a la muralla como "muy fuerte y hermosamente torreada". De hecho, un famoso poema ubetense señala que llegó a haber 35 torres, que eran custodiadas por las familias más notorias de la ciudad.

Aunque las guerras napoleónicas y el crecimiento demográfico de la ciudad llevaron a su deterioro, en la actualidad aun cuenta con muchos restos que forman parte de un ambicioso proyecto de revalorización de la muralla medieval, que alcanza su máxima expresión con el Centro de Interpretación del Portillo de Santo Cristo. Éste se encuentra situado en uno de los torreones más monumentales de Úbeda.

En su interior podrás realizar un recorrido cronológico por la historia de la ciudad y su muralla, acompañado de múltiples recursos multimedia que te permitirán conocer la vida y las necesidades defensivas de una ciudad de frontera. Además, podrás disfrutar de unas vistas excepcionales en las que los olivos se extienden hasta donde se pierde la mirada.

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